La triquiasis es una condición ocular por la cual las pestañas crecen de manera anómala hacia el interior del ojo, es decir, en dirección al globo ocular. No es la misma afección que la distiquiasis, en la cual además de crecer las pestañas hacia el interior, implica la aparición de una segunda fila de pestañas adicional.
Esta posición de las pestañas provoca que rocen en la superficie del ojo, lo que puede causar irritación, enrojecimiento, lagrimeo excesivo, sensación de cuerpo extraño y, en casos más severos, daño en la córnea debido al contacto constante.
La triquiasis puede surgir como consecuencia de infecciones oculares previas, inflamaciones crónicas como la blefaritis, traumatismos o enfermedades sistémicas como el tracoma. Es importante tratar cuanto antes la triquiasis para aliviar los síntomas y evitar que la córnea continúe dañándose y conlleve otras complicaciones más graves, como úlceras corneales o infecciones.
El tratamiento de esta condición varía según la gravedad, incluyendo desde métodos temporales, como la depilación de las pestañas afectadas, hasta métodos más permanentes, como la electrodepilación, crioterapia o cirugía para reposicionar las pestañas.