Así es, cuando las personas ciegas de nacimiento realizan tareas como resolver problemas matemáticos, se activan áreas de su cerebro que hasta ahora estaban relacionadas exclusivamente con la visión.
Las pruebas de resonancia magnética funcional permiten ver qué áreas del cerebro tienen actividad cuando se desempeña una determinada tarea.
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Un equipo del departamento de psicología y ciencias del cerebro de la Johns Hopkins University ha llevado a cabo un estudio mediante resonancias magnéticas sobre una muestra de 17 personas ciegas de nacimiento y se ha descubierto que, cuando se le pide a alguna de estas personas que resuelva un problema algebraico, el sistema evidencia signos de actividad cerebral en áreas del córtex visual.
Cuando las ecuaciones se complican, las áreas visuales del cerebro intensifican su actividad.
Por contra, las áreas del córtex visual de 19 personas con visión, y que también participaron en el estudio, no incrementaron su actividad. Esto sugiere que, realmente las personas invidentes de nacimiento pueden utilizar el córtex visual para la resolución de problemas, en este caso de tipo matemático.
El hallazgo cambia la idea de que el tejido cerebral destinado a una determinada función está limitado a tareas estrictamente relacionadas con esta función.
«Ver cómo la estructura del córtex visual puede ser utilizada para algo muy diferente a su función original es muy sorprendente» dice Melissa Libertus, una de las especialistas que han llevado a cabo el estudio. «Esto evidencia un grado extraordinario de adaptabilidad del cerebro.»
«Los ciegos utilizan el área visual del cerebro para resolver problemas matemáticos.»
Estudios anteriores demostraron que el córtex visual puede ser reutilizado para procesar información de otros sentidos, como puede ser el oído o el tacto. En este estudio, sin embargo, se quería saber si este área del cerebro se podía utilizar para procesar información de una naturaleza diametralmente opuesta, algo que no tuviera nada que ver con los sentidos. Así que se escogió las resolución de problemas algebraicos.
Durante el experimento, ambos grupos de estudio (videntes e invidentes) resolvieron ecuaciones matemáticas sencillas. Se les preguntaba por cosas como: «12 menos 3 igual a x, y 4 menos 2 igual a x» y tenían que decir el valor de x al mismo tiempo para las dos ecuaciones.
En ambos casos, dos áreas del cerebro asociadas al cálculo numérico se activaron. Pero sólo en los individuos invidentes hubo un incremento de actividad en áreas normalmente destinadas a la visión.
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