Lejos de lo que muchos piensan, el problema de tener miopía no radica solo en la necesidad de usar gafas, lo cual es fácilmente solucionable mediante cirugía láser o con lente intraocular. Y es que cuando la miopía está por encima de las 6 dioptrías aproximadamente se considera una miopía patológica o magna. Aquí el problema ya no es solo la necesidad de gafas, sino que como el globo ocular tiene una longitud considerablemente mayor a la habitual, la retina se encuentra debilitada y es susceptible a complicaciones graves a edades tempranas de la vida, como por ejemplo la aparición de membranas neovasculares o desprendimiento de retina. De hecho, estas complicaciones son una de las principales causas de incapacidad visual en pacientes de edad media en el mundo occidental.
De esta forma, si conseguimos que la miopía no alcance cifras tan altas mediante el uso de las técnicas de control de miopía (como el uso de estas lentillas específicas), evitaremos complicaciones a largo plazo a los pacientes.