Un vistazo rápido a la UVEÍTIS en 20 segundos
QUÉ ES UVEÍTIS
Una inflamación intraocular en la capa media del ojo en uno o todos sus segmentos.
SÍNTOMAS PRINCIPALES
Ojo rojo, visión nublada, «moscas flotantes» en el campo visual entre otros.
DIAGNÓSTICO Y PRUEBAS
En un oftalmólogo, por medio de un examen de fondo ocular entre otras pruebas complementarias.
TRATAMIENTO RECOMENDADO
Tratamiento escalonado partiendo de colirios antiinflamatorios hasta llegar incluso a un tratamiento biológico.
La uveítis es una inflamación de la capa media del ojo, la úvea y los tejidos circundantes, ya sea de todos los segmentos del ojo o solo de ciertas partes y aunque cursa con bastante frecuencia, especialmente en su variante anterior, es una de las patologías oculares más desconocidas para la población.
Como luego veremos en los síntomas más habituales la uveítis puede ser dolorosa y en muchos casos los ojos pueden estar rojos o la visión puede estar nublada y complicarse severamente.
Aunque en la mayoría de los casos el pronóstico es favorable con el tratamiento adecuado, debemos enfrentarla como una enfermedad grave pues en su peor evolución podría afectar de manera irreversible a la visión del paciente incluso ocasionando ceguera, glaucoma o cataratas. Así que un «simple ojo rojo» debe llamar nuestra atención y acudir al oftalmólogo pues quizá estemos ante un caso de uveítis.
«Tener una enfermedad autoinmune va a ser un factor de riesgo muy importante de cara a padecer una uveítis»
Dra. Diago. Oftalmóloga.
En este artículo vamos a conocer qué es exactamente, qué tipos de uveítis existen, cómo tratarla según el caso y resolveremos bastantes dudas frecuentes que nos hacen los pacientes en consulta. Si estás interesad@ en saber sobre la enfermedad sigue leyendo que empezamos a profundizar:
Causas de la uveítis
La uveítis puede presentarse en algunos casos como una enfermedad idiopática, es decir, las causas de la uveítis pueden no estar claras y en casi el 50% de los casos nunca se llega a encontrar esta causa.
Sin embargo en otros casos existen múltiples factores que están relacionados con la aparición frecuente de esta patología siendo 6 los principales motivos o factores de riesgo para desarrollar uveítis.
- Idiopática ➤
- Problemas del sistema inmune ➤
- Infecciones ➤
- Trauma o lesiones en el ojo ➤
- Factores genéticos (muy poco frecuente) ➤
- Algún tipo de cáncer ➤
Uveítis idiopática
Como veíamos anteriormente en casi el 50% de los casos no se alcanza a saber el verdadero origen de la uveítis, es el caso más frecuente y la mayoría son de tipo uveítis anterior. Si con el tratamiento habitual la uveítis anterior desaparece y no cursa con otra sintomatología ni se repite en el tiempo no se pedirán nuevos estudios posteriores sobre inmunología y se tratará como un episodio aislado.
Problemas con el sistema inmune
En muchos casos, especialmente cuando la enfermedad es recurrente o pasa a sus peores estadios el paciente puede tener algún tipo de enfermedad sistémica o problemas con el sistema inmune, es decir, no es una enfermedad aislada sino parte de un problema mayor que afecta a varios aspectos de la salud del paciente.
Algunas de estas enfermedades asociadas son el lupus, la sarcoidosis, la espondilitis anquilosante, la artritis juvenil, la enfermedad de Behçet, etc… En este caso la uveítis no debe tratarse como un problema aislado sino atenderse con una visión global que incluya al reumatólogo o internista especialista y al oftalmólogo.
Infecciones
Otra de las razones principales son las infecciones (parasitos, bacterias o virus) que pueden afectar al ojo y por lo tanto producir una inflamación intraocular.
Como vemos en este estudio, la toxoplasmosis ocular es la causa más frecuente de uveítis posterior. Esta enfermedad parasitaria producida por la ingesta de alimentos contaminados la sufren al menos 500 millones de personas cada año en todo el mundo, ocasionando disminución de la visión y ceguera en muchas de ellas.
Otras infecciones que pueden desencadenar la enfermedad son el herpes simple y zoster, el SIDA (VIH), la sífilis o la enfermedad de Lyme entre otras.
Lesiones en el ojo o traumas
Otra de las causas que pueden provocar esta inflamación ocular son las lesiones exógenas producidas en el ojo como un arañazo, un corte, una quemadura o tras una cirugía.
En estos casos la uveítis suele ser pasajera y además de lagrimeo, enrojecimiento y dolor ocular, los pacientes pasarán unos días con fotofobia (molestias ante luces intensas).
Causas genéticas
Aunque la uveítis no se transmite de padres a hijos, un gen conocido como HLA-B27 se ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar uveítis en la parte frontal del ojo (uveítis anterior). Este gen se ha encontrado en personas con algunas enfermedades autoinmunes, como la espondilitis anquilosante y la colitis ulcerosa.
Algunos tipos de cáncer
Muy excepcionalmente la causa puede ser un cáncer que esté afectando al ojo como el linfoma.
Tipos de uveítis
Para valorar el tipo de uveítis que estás padeciendo se tendrá en cuenta qué partes de tu ojo están inflamadas, en la uveítis anterior será la parte frontal, en la uveítis intermedia el vítreo y en la uveítis posterior la zona afectada será la retina y coroides. Pero vamos a verlo con más detalle.
Uveítis anterior
Es el tipo de uveítis más común y la menos severa ya que el paciente responde muy bien al primer escalón terapeútico.
También es conocida como iritis por ser el iris la principal zona afectada y se caracteriza por la inflamación de la parte anterior del ojo. Aunque como todos los tipos de uveítis puede estar asociada a otras enfermedades esta variedad se presenta también en pacientes jóvenes y de mediana edad con buena salud ocular.
Uveítis intermedia
En la uveítis intermedia se inflama la zona gelatinosa de la cavidad vítrea (humor vítreo) y que puede estar asociado con envainamiento venoso y edema macular. Cuando además el paciente sufre «bancos de nieve» o «bolas de nieve» en ausencia de una enfermedad sistémica como puede ser la sarcoidosis o una infección como la enfermedad de Lyme a este tipo se le conoce como pars planitis.
Uveítis posterior
Afecta principalmente a la parte posterior del ojo (úvea posterior o coroides), una membrana muy irrigada con vasos sanguíneos y tejido conectivo que se encuentra entre la retina y la esclerótica. A este tipo de inflamación también se le llama coroiditis y si la afección llega a la retina, coriorretinitis.
En estos casos de uveítis posterior la enfermedad suele estar relacionada con el padecimiento de alguna infección sistémica o a enfermedades de tipo autoinmune.
Panuveítis
La panuveítis o uveítis difusa es aquella que afecta a todas las estructuras intraoculares. De los nombrados, es el proceso inflamatorio más grave y generalmente se asocia a enfermedades sistémicas. Se ven afectadas estructuras como: la cámara anterior, cavidad vítrea y la retina, coroides y vasos retinianos.
¿Cuáles son los síntomas de la uveítis?
Los síntomas de la uveítis son variados y dependen tanto del estadio de la enfermedad como del tipo de agente que lo ha causado, sin embargo estos son algunos de los principales síntomas que notan los pacientes con uveítis:
- Dolor en los ojos
- Parpadeo constante
- Ojos rojos
- Fotofobia (molestia a luces intensas)
- Visión borrosa
- Miodesopsias o ver de cuerpos flotantes como “moscas” o “telarañas”
- Pérdida de visión
- Alteración de forma de la pupila
Síntomas de la uveítis anterior
En el caso de la uveítis anterior los síntomas principales son el enrojecimiento ocular, pupila cerrada, la visión borrosa, fotofobia o excesiva sensibilidad a altas luces y el dolor en los ojos.
Síntomas de la uveítis posterior e intermedia
Si el paciente padece uveítis intermedia los síntomas suelen incluir visión borrosa, miodesopsias (o ver cuerpos flotantes como “moscas” o “telarañas”) y un leve o moderado dolor ocular.
Síntomas de la uveítis posterior
Los síntomas de la uveítis posterior no suelen ser especialmente dolorosos, normalmente comienzan con visión borrosa y una reducción importante de la agudeza visual habitual. Además el paciente describe la percepción de manchas, o cuerpos extraños en su campo visual llamadas habitualmente «moscas» o «telarañas» y escotomas que son pequeñas áreas de la visión afectadas.
Cuando la uveítis afecta a la mácula esta pérdida de visión es peligrosa y puede afectar de manera grave.
Cómo se diagnostica la uveítis
Un diagnóstico de uveítis requiere un examen exhaustivo por parte de un oftalmólogo con varias pruebas y una revisión detallada al historial del paciente.
Aunque al ser una enfermedad idiopática puede que nunca lleguemos a saber la raíz del problema, el oftalmólogo centrará sus esfuerzos en determinar si está causada por una infección o por una enfermedad sistémica más severa. En este segundo caso remitirá al paciente al reumatólogo o al especialista internista para que la detección y el tratamiento sea el más adecuado para esta enfermedad subyacente.
Algunas de las pruebas que puede usar tu oftalmólogo para detectar la uveítis y su origen son:
- Una tabla optométrica o una prueba de agudeza visual: Mediante esta clásica prueba tu oftalmólogo determinará si hay pérdida de visión y le alertará de la necesidad de exámenes más complejos para valorar las diferentes causas probables.
- Tonometría o pruebas de presión intraocular: Se trata de un examen para medir la presión dentro de los ojos.
- Examen con lámpara de hendidura. Esta lámpara es como un microscopio que mediante la aplicación de una luz intensa identifica las células inflamatorias en la parte anterior del ojo. A través de este examen se podrá valorar el estado de la parte anterior del ojo incluyendo córnea, cámara anterior (donde se verán las células inflamatorias flotando), iris y cristalino.
- Examen de fondo de ojo: Este examen, también conocido como oftalmoscopia o fundoscopia es de gran ayuda para la detección de uveítis pues tras dilatar las pupilas con gotas y aplicar una luz brillante te permite la valoración del estado de cavidad vítrea, retina, coroides y nervio óptico
- Retinografía: En esta prueba obtenemos la misma imagen que en el fondo de ojo pero quedando reflejado en una fotografía que será de gran utilidad para monitorizar la progresión de la enfermedad.
- Angiografía fluoresceínica (AGF): Mediante esta prueba de contraste se permitirá fotografiar la inflamación de los vasos sanguineos intraoculares.
- Tomografía de coherencia óptica: Esta prueba analiza el grosor de la retina y coroides para confirmar el grado de inflamación.
- Análisis del vítreo.
- Análisis de sangre.
Tratamientos para la uveítis
Como vemos en el vídeo de la doctora Diago que te mostramos al principio del artículo, habitualmente el tratamiento de la uveítis suele ser escalonado, es decir, se comienza con el nivel terapéutico más sencillo y menos invasivo para que dependiendo de la respuesta del paciente se logre solucionar el problema o sea necesario pasar a un escalón terapéutico superior.
Esto siempre dependerá del tipo de uveítis que estemos tratando pues no será lo mismo un tratamiento para una anterior y con cuadro leve por una lesión, que un tratamiento para una uveítis posterior para un paciente con lupus que necesitará de la asistencia de un reumatólogo con su propias pautas de medicación para la enfermedad principal.
Así, ante una uveítis anterior el oftalmólogo procederá con un tratamiento antiinflamatorio ya que el foco principal será la reducción de la inflamación intraocular, si no remitiera o la inflamación se repitiera a menudo se indicará un estudio sistémico. Para uveítis intermedias o posteriores (y anteriores más complicadas) además de los tratamientos médicos, el oftalmólogo trabajará de acuerdo con el reumatólogo o internista para hacer ese estudio sistémico y comprobar si hay otra enfermedad subyacente y causante de estas complicaciones.
En cualquier caso en este artículo vamos a mostrar los principales escalones terapéuticos a los que recurrimos para tratar la uveítis.
Tratamiento tópico ciclopléjico
Para la uveítis anterior el tratamiento debe comenzar rápidamente para prevenir posibles complicaciones o secuelas. Los primeros pasos suelen ser la administración de gotas midriáticas que relajan los músculos del ojo y con ello dilatan la pupila para aliviar el dolor.
Tratamiento corticoesteroide
Como tratamiento combinado al tópico ciclopléjico el doctor pautará habitualmente colirios de prednisolona, un tipo de corticoide con un gran poder antiinflamatorio que puede controlar efectivamente los brotes agudos de uveítis. Estos esteroides interrumpen la función normal del sistema inmunológico evitando la liberación de los químicos que provocan esa primera inflamación.
Inyecciones perioculares
Cuando los tratamientos anteriores no han funcionado es posible que el oftalmólogo paute inyecciones de esteroides perioculares, es decir, en la zona de alrededor del ojo. Este tratamiento se realiza con anestesia tópica con gotas para adormecer el ojo y que las molestias sean mínimas.
Tratamiento con antivirales o bactericidas
Si es posible detectar que el causante de la inflamación es una infección por virus, hongos o baterias, al tratamiento anterior se le sumará la pauta de medicamentos antivirales (para virus), antiobioticos (para bacterias) o antimicóticos (para una infección por hongos).
Tratamiento inmunosupresor
Si ninguno de los anteriores tratamientos ha funcionado probablemente su oftalmólogo pida al reumatólogo un estudio sistémico para encontrar otras posibles causas internas o enfermedades que estén provocando la uveítis.
Los inmunosupresores actúan controlando el sistema inmunológico y alterando el proceso de inflamación pero por su alcance deben ser pautados y controlados seriamente por parte del oftalmólogo y/o reumatólogo. Este control se hace con el fin de evitar efectos negativos para la salud del paciente ya que además de efectos secundarios como hipertensión, dolores de cabeza o pérdida de cabello, los inmunosupresores afectarán a la vulnerabilidad del paciente a otras infecciones y contagios.
Tratamiento biológico
En los últimos años se han aprobado tratamientos con inmunosupresores conocidos como biológicos basados en el uso de anticuerpos monoclonales que están arrojando resultados muy prometedores.
¿Se puede prevenir la uveítis?
Actualmente no hay evidencias ni estudios que garanticen la prevención de la uveítis. Sin embargo, tanto antes de aparecer como una vez ya hemos tenido un brote hay algunas pautas que debemos tener en cuenta para que no reaparezca o se agrave la enfermedad.
Diagnóstico precoz
Al ser una enfermedad que puede convertirse en recurrente será de especial importancia detectar la uveítis con los primeros síntomas, de esta manera el oftalmólogo podrá tratarla a tiempo con mayores garantías de una recuperación óptima.
Identificar y tratar la enfermedad que lo provoca
En muchos casos la enfermedad es idiopática y no llegamos nunca a saber lo que la ha provocado, pero ante un brote tu doctor tratará de detectar si hay alguna enfermedad o infección asociada para no tratar únicamente los síntomas de la uveítis sino recurrir a la fuente del problema.
De esta manera el oftalmólogo podrá tratarlo en conjunto mejorando la efectividad y la capacidad diagnóstica y terapéutica.
Seguir correctamente las pautas de tratamiento
La uveítis es una enfermedad seria y en muchos casos el tratamiento también lo será, para evitar una mala curación o la posible recurrencia de esta patología el paciente debe seguir las pautas marcadas por su oftalmólogo y no dejarlo cuando «ya se encuentre bien» o el enrojecimiento haya desaparecido.
Cuáles son las principales complicaciones de la uveítis
Dependiendo del tipo de uveítis que presente el paciente las complicaciones de no tratarla adecuadamente pueden variar, no será lo mismo una uveítis anterior por una infección que una uveítis producida por una enfermedad autoinmune.
En cualquier caso debemos tener en cuenta que es una enfermedad importante y debemos tratarla como tal ya que dentro de los malos pronósticos podríamos tener, inflamación macular, cicatrices intraoculares, cataratas, glaucoma, desprendimiento de retina e incluso pérdida permanente de la visión constituyendo un 10-15% de los nuevos casos de ceguera.
Otras consultas frecuentes sobre la uveítis
Además de la información principal que hemos mostrado en este artículo existen múltiples dudas frecuentes sobre la uveítis que nos trasladan nuestros pacientes y que hemos recopilado para nuestros lectores. Si tienes cualquier otra duda escríbela en los comentarios y completaremos el artículo.
¿Cuánto dura el tratamiento de la uveítis?
La duración del tratamiento de la uveítis depende del caso y del tipo de uveítis del paciente.
Como hemos comentado la uveítis puede ser un episodio leve y aislado que se corrige en poco tiempo o formar parte de una patología más compleja que necesite de varios meses o años de tratamiento.
¿La uveítis es contagiosa?
No, la uveítis es una respuesta inflamatoria. No es una infección y, por tanto, no es contagiosa (muy diferente de la conjuntivitis a la que puede parecerse por enrojecimiento de los ojos).
¿Puedo ir a trabajar con uveítis?
Generalmente sí, es recomendable utilizar gafas de sol cuando tengas síntomas de iritis (o un brote), para ayudar con la sensibilidad a la luz. En cualquier caso y como siempre la opinión de tu doctor será la que marque tu pauta.
¿La uveítis es hereditaria?
No, aunque la uveítis no se transmite de padres a hijos, un gen conocido como HLA-B27 se ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar uveítis ya que aproximadamente la mitad de las personas con uveítis anterior tienen el gen HLA-B27, en cualquier caso esta información sigue en fase de estudio.
¿Puede la uveítis ser causada por el estrés?
El estrés no es bueno para nada y se está estudiando su incidencia como factor de riesgo para desarrollar uveítis anterior aguda aunque todavía no hay evidencias claras para relacionarlos directamente.
¿A que edad aparece la uveítis?
Aunque toda la población de cualquier edad puede padecer uveítis es una enfermedad con más incidencia en personas de 20 a 50 años.
¿La uveítis afecta a un ojo o a los dos?
La uveítis se puede presentar de forma asimétrica afectando a un solo ojo o de forma simétrica afectando a los dos.
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Si has detectado alguno de los síntomas que hemos citado en este artículo o quieres información sobre cuándo operarse de presbicia o vista cansada, puedes pedir cita en nuestra Clínica Oftalmológica Rahhal para que nuestro equipo médico experto valore tu caso.
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casuistica de pacientes pseudofaquicos con uveitis que desarrollen sinequias anteriores
Excelente me gusto mucho la información ya que creo yo tener el problema de la uveitis y me urge saber como controlarla gracias
Llevo 14 años con uveitis antes no se notaba mucho pero desde hace unos meses es mas visible ya que esta cambiando se color el ojo derecho color banco que debo hacer para que no se ponga peor el ojo aclaro que estoy cada año en controles pero los medicos me dicen que por la enfermedad es normal y no se puede hacer nada gracias…
Hola yo padesco de uveitis.me interesa. Saber bien a rais de que gracias
Muchas gracias por el articulo
Consideró que el reportaje fue breve conciso verás y muy sencillo para su interpretación y Su comprensión de dicho padecimiento
Tube uveitis a los 13 años , me operaron con 16, ahora tengo 41, y me gustaría levar un seguimiento
Mi hijo tuvo oveitis hace un año ,se curo a tiempo,el es muy sano no padece de ninguna enfermedad .Recientemente ,tiene dolor en la espalda y el pie lo tiene inflamado .Fue al medico y le hicieron rayo x no tiene nada en su columna ,no ernia y nada en los disco.Se siente cansado y preocupado por su pie . MI ME PREGUNTA ES TIENE QUE VER ANTERIOR ENFERMEDAD DE oveitisDE HACE UN AÑO CON EL PADECIMIENTO DEL PIE .QUE USTED ME RECOMIENDA .GRACIAS
Muy buena información nesesito datos de una clínica para atender a un familiar.se los agradeseria que me den informes de alguna clínica.gracias